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Concluye gobierno de Agustín Quiroz con serios problemas financieros, administrativos, laborales y sociales

Por: David Meza Ramírez

El paro laboral de los agentes de la policía municipal y las manifestaciones y exigencias de pago de los empleados sindicalizados del ayuntamiento, hechos ocurridos el pasado  viernes 14 de septiembre y que se extendieron hasta el sábado 15, fueron el colofón del gobierno de Agustín Quiroz, que pasó de un dulce romance al inicio, a un amargo divorcio tres años después.

Agustín Quiroz ha sido hasta el momento el candidato a presidente municipal que ha obtenido más votos en las urnas, (más de tres mil) por lo que llegó a la silla presidencial con la más alta popularidad registrada hasta entonces. Las expectativas desde luego eran muchas, los resultados al final, no dejaron satisfechos a los ciudadanos.

En su gobierno, Quiroz tuvo, cuatro tesoreros diferentes, dos secretarios del ayuntamiento, tres Secretarios de Desarrollo Social, tres Contralores, dos Directores de Obras Públicas, cuatro Directores de Protección Civil, dos Directores de OOMAPAS, tres Directores de Comunicación Social, dos Directores de Planeación y Desarrollo y un sinfín de cambios más que se dieron en el organigrama municipal, que si bien es cierto algunos fueron para bien, definitivamente la inestabilidad administrativa quedó de manifiesto.

Aunque no se puede negar la obra de gobierno, sobre todo del primer año, donde destaca el apoyo a las escuelas, la pavimentación, la electrificación, el drenaje y la ampliación de la red de agua potable, es contundente que los gobiernos no son recordados por como empiezan, sino por como terminan.

En este sentido, el colapso financiero del ayuntamiento, que lo colocó como el peor calificado en todo Sonora, en su cuenta pública del 2011 con una ínfima calificación de 4.87, (en escala de 100) es el reflejo fiel de que las finanzas y el desorden en esta área, dieron al traste con muchos otros aspectos, mismos que provocaron el estancamiento y la inmovilidad de la administración municipal.

A esto se suman las obras inconclusas, la falta de pago a proveedores, a empleados municipales incluyendo policías, la falta de servicios para la comunidad como recolección de basura, raspado y regado de calles, alumbrado público, bacheo y recarpeteo de avenidas y sobre todo la transparencia en el uso de los recursos públicos, que como repetimos, fueron observados por el ISAF durante estos tres años en más de 190 observaciones, de las cuales, hasta la última revisión solo se habían solventado 5.

Las manifestaciones de inconformidad ciudadana se hicieron patentes principalmente a través de FACEBOOK en la cuenta del propio presidente Quiroz, quién en los últimos meses pudo ver cómo los ciudadanos utilizaron esta red social para externar sus molestias ante la falta de un servicio o algún problema que no era atendido por el gobierno, fue aquí, mayoritariamente, donde la prensa, los periodistas, pudimos tener un termómetro muy fiel del descontento popular, pues en su mayoría las quejas eran publicadas por personas de carne y hueso, que daban su nombre y su rostro a la denuncia, lo que las hace más valederas.

A lo administrativo se sumó entonces lo social, el caos vial por la construcción del nuevo puente, la inseguridad cuando un comando armado se paseó por el pueblo y realizó algunos “levantones” (aunque las autoridades estatales aun lo siguen negando), la crisis económica que azota la ciudad, los altos cobros de la Comisión Federal de Electricidad por el consumo de la luz y hasta dos plagas apocalípticas, piojos y grillos, para rematar.

El gobierno de Quiroz ha concluido, algunos, sí, algunos, los menos desde luego, externan comentarios a favor y afirman que no fue tan malo, que sí hizo obra y cumplió lo prometido en campaña; otros, la mayoría, juzgan que el gobierno panista empezó bien, pero perdió el rumbo y nunca lo puedo recuperar, que el gobierno de todos y para todos, se tornó solo para unos cuantos, para los amigos del presidente.